EL PLAN DEL LITORAL IMPULSARÁ LA ADAPTACIÓN DEL PLANEAMIENTO A LAS NECESIDADES
El consejero de Agricultura, Pesca y Medio Ambiente, Luis Planas, ha resaltado la necesidad de compatibilizar la conservación de los activos naturales de Andalucía con el desarrollo sostenible de las actividades urbanas y turísticas, un camino hacia el que se dirige el Decreto-ley de Medidas Urgentes en Materia Urbanística y para la Protección del Litoral. Estas declaraciones forman parte de su intervención en el foro ‘El sector agroalimentario en Andalucía: transformación agroindustrial y orientación a las nuevas demandas’ celebrado hoy en Málaga con motivo del 75 aniversario del diario Sur.
Planas ha calificado esta norma como “una medida necesaria para proteger lo valioso y adaptar el planeamiento a las necesidades reales” y, en cuanto a la formulación del Plan de Protección del Corredor Litoral -cuyo inicio se ha aprobado esta semana en Consejo de Gobierno-, el consejero ha explicado que la Junta de Andalucía va a contar con el apoyo “de una comisión en la que estará representadas todas las administraciones con competencias (Gobierno regional y central y ayuntamientos)“.
Sobre las medidas cautelares derivadas del desarrollo de esta normativa, ha especificado que “sólo afectan a una pequeña franja de los primeros 500 metros y, una vez redactado el Plan, sólo a aquellas zonas que éste determine”. Además, Luis Planas ha añadido que sólo se refiere al nuevo planeamiento de desarrollo de suelos urbanizables, es decir, “suelos que llevan “dormidos” al menos 6 años”. Actualmente, la Comunidad cuenta con más de 30 millones de metros cuadrados en primera línea de costa que cuentan con plan parcial aprobado para su inmediata urbanización, donde se podrían construir cerca de 40.000 viviendas, la mitad de ellas, en la provincia de Málaga.
Por otro lado, el consejero también ha puesto en valor el interés de la Administración andaluza por promover un desarrollo más ordenado y sostenible con la adaptación de los planes urbanísticos al Plan de Ordenación del Territorio de Andalucía (POTA), un cumplimiento que “supone una mayor seguridad jurídica para las inversiones al adaptarse a la legislación actual”.
“La protección de los valores naturales de nuestro litoral supone una magnífica oportunidad para revalorizar nuestro sector turístico, apostando por la calidad y la sostenibilidad”, ha declarado Planas señalando estos mismo principios como la base de un sector agroalimentario que “constituye una verdadera columna vertebral de Andalucía”.
En referencia a esta actividad, el consejero estima que “estamos yendo en la buena dirección, ya que las exportaciones extracomunitarias son cada vez mayores, pero aún queda trabajo por hacer para mejorar la rentabilidad de todos los eslabones de la cadena de valor y ganar en eficiencia”. Entre las fortalezas del sector andaluz, ha remarcado su modernidad, competitividad, sostenibilidad y la apuesta por la internacionalización.
Por otro lado, el consejero ha aludido, como uno de los principales objetivos actuales, a la importancia de “lograr un sector agroalimentario con mayor dimensión y capaz de obtener el máximo valor añadido” en base a tres pilares fundamentales: la calidad, la sostenibilidad y la innovación.
Y para seguir avanzando en este camino, la Junta de Andalucía ha mostrado su respaldo continuado durante los últimos años a través, entre otros ejemplos, de su papel en el control de las cualidades de los productos elaborados en nuestro territorio. “La calidad de los alimentos andaluces es una responsabilidad de todos, desde el campo hasta el punto de venta”, ha declarado Luis Planas. En este ámbito destacan las más de 1.700 inspecciones anuales a industrias que realiza la Consejería de Agricultura, Pesca y Medio Ambiente.
La sostenibilidad se postula como una clave tanto en la agroindustria, siendo Andalucía líder europeo en producciones respetuosas con el medio ambiente (cerca de un millar de hectáreas en Producción Ecológica y casi 500.000 hectáreas en Producción Integrada); como en el aprovechamiento del capital natural para generar riqueza y empleo a través de la Economía Verde, que hoy emplea a unas 90.000 personas en Andalucía (alrededor de 12.000 en Málaga) en diversos subsectores cuya facturación global asciende a cerca de 6.500 millones a nivel regional y unos 1.200 millones en esta provincia. El Plan de Choque por el Empleo en Andalucía incide también en este mismo sentido en Málaga a través de proyectos de mejora de caminos rurales (6,7 millones de euros) y de mejora forestal y regeneración ambiental (6 millones de euros). Esta inversión generará en la provincia 67.000 jornales.