Categorías
Actualidad TROPS Nutrición y Salud

La diabetes y el consumo del mango

¿Es posible comer mango si soy diabético? La respuesta es sí, siempre que se tome en raciones de 80 a 100 gramos en limpio y como postre en comidas equilibradas. Generalmente, una persona con diabetes no solo puede sino que debe consumir fruta, al menos 3 raciones al día y con un plan de alimentación adecuado a su enfermedad. Con motivo del Día Mundial de la Diabetes, os contamos todo sobre el consumo de mango y la diabetes.

¿Es posible comer mango si soy diabético? La respuesta es sí, siempre que se tome en raciones de 80 a 100 gramos en limpio y como postre en comidas equilibradas. Generalmente, una persona con diabetes no solo puede sino que debe consumir fruta, al menos 3 raciones al día y con un plan de alimentación adecuado a su enfermedad. Te contamos todo sobre el consumo de mango y la diabetes.

mango-diabetes

Diabetes y frutas

  • Ninguna fruta es mejor que otra para las personas con diabetes, pues lo importante es el momento de consumo, la preparación de la fruta, la cantidad ingerida y los alimentos que la acompañan.

  • A pesar de que algunas frutas pudieran tener más azúcares que otras, si éstas se toman junto a otros alimentos, por ejemplo, de postre, el efecto de ese azúcar en el organismo es muy diferente del que se tendría ingiriendo esa fruta en una merienda sin otros alimentos que la acompañen. Por lo tanto, lo importante es el contexto en el que se consumen las frutas.

  • Una persona con diabetes PUEDE Y DEBE tomar fruta, al menos, 3 raciones al día y en el contexto de un plan de alimentación adecuado a su enfermedad.

  • Como recomendación general:

    • Tomar frutas enteras, a ser posible con piel, después de su limpieza y desinfección, y evitar las frutas trituradas, licuadas o en zumos.

    • El momento de consumo más adecuado es el postre y acompañando el desayuno, antes que consumirlas de manera aislada, en cuyo caso es importante controlar la cantidad y el tipo de preparación, evitando las desecadas, licuadas o en zumos. Siempre es mejor tomar fruta junto a otros alimentos que sola.

    • Respecto a las frutas desecadas, si se toman, debe hacerse en cantidades pequeñas. Por ejemplo, 1-2 dátiles/higos secos/ciruelas o 5-8 pasas, y siempre junto a otros alimentos bajos en azúcar como el pan integral o frutos secos crudos.

    • Las frutas como el mango, la uva, el caqui, los higos, los plátanos maduros, la chirimoya o las ciruelas deben tomarse en raciones de 80-100 gramos en limpio y mejor como postres en comidas equilibradas.

  • El mensaje clave es que la persona con diabetes que siga un plan de alimentación adecuado, puede y debe tomar fruta a diario, al menos 3 raciones variadas, incluidas las que son ricas en azúcares, preferentemente frescas, enteras, de temporada y, mejor, si son de proximidad.

El mango, una fruta llena de nutrientes

Al igual que en la mayoría de las frutas y hortalizas, los hidratos de carbono son los macronutrientes mayoritarios en el mango, predominando entre ellos la sacarosa, glucosa y fructosa, aunque en los mangos inmaduros existe cierta cantidad de almidón, que va convirtiéndose en monosacáridos y disacáridos a medida que madura el fruto.

Los frutos verdes son ricos en vitamina C y contienen una cantidad moderada de provitamina A, mientras que los mangos maduros son fuente importante de provitamina A (principalmente en forma de beta-carotenos), siendo moderado su aporte de vitamina C. Concretamente, un mango de 300 g de peso aporta el 70% de la cantidad diaria recomendada de vitamina A , y 44 mg por cada 100 g de porción comestible de vitamina C. Un mango de tamaño medio (300 g) cubre el 165% de las necesidades diarias de esta vitamina. También es una fuente de vitamina E y folatos y aporta, en menor medida, otras vitaminas como B2 y niacina.

La vitamina A es esencial para el mantenimiento de los tejidos epiteliales (piel y mucosas). Además, los betacarotenos y las vitaminas C y E actúan como potentes antioxidantes que neutralizan los radicales libres, moléculas responsables del envejecimiento de las células, que podrían contribuir a prevenir el cáncer e impiden la oxidación de las lipoproteinas LDL-colesterol, protegiendo así frente a la arteriosclerosis.

Entre los minerales del mango destaca el hierro, aunque también aporta pequeñas cantidades de fósforo y calcio. Esta fruta también contiene fibra (pectinas), ácidos orgánicos (cítrico y málico) y taninos.

En su composición destaca igualmente la presencia de una sustancia denominada mangiferina. Algunos autores han atribuido a esta sustancia determinadas propiedades inmunomoduladora, antivirales y antitumorales, aunque los estudios al respecto son preliminares y no concluyentes.

¿Quieres saber por qué el mango es tan beneficioso nutricionalmente para los deportistas? Entra aquí y descúbrelo.

 

Fuente: Asociación 5 al Día